martes, 16 de noviembre de 2021

EVOLUCIÓN DE LA SOCIOLOGÍA DEL TRABAJO EN ESPAÑA

Alberto Riesco-Sanz
Alberto Riesco-Sanz y Pilar Carrasquer (2021) realizan una interesante reflexión sobre la evolución de la sociología del trabajo en España desde la década de los 70s a nuestros días.

Señalan que la disciplina llega a nuestros días con una consolidación que se ha producido en décadas precedentes y, entre los aspectos de reciente evolución, destacan los siguientes:
  • Consecuencia de las requerimientos de las revistas indexadas, los trabajos publicados son cada vez más empíricos, más acríticos y menos inclinados a la elaboración teórica.
  • Presencia cada vez mayor de análisis comparativos a nivel internacional.
  • Se produce una creciente tendencia hacia la interdisciplinariedad, si bien “este movimiento se ha traducido en muchas ocasiones en una disputa, más que un diálogo, entre disciplinas, donde aquellas aquellas mejor conectadas con el poder político terminan por dominar e impornerse en estas áreas de estudio”.
  • Siguiendo a Sayad (1990), el objeto “trabajo” ha ido perdiendo prestigio a medida que el movimiento obrero ha ido perdiendo capacidad de influencia.
  • Cierta “capilarización” del dicho objeto “trabajo” más allá de la sociología del trabajo clásica, ligada a conceptos como reproducción, género, cuidados, familia, etc.

A partir de estos elementos, queremos destacar que, efectivamente, la consolidación de la sociología del trabajo se ha realizado, en su práctica totalidad, ligada a la Academia. Ello ha colocado a las áreas de trabajo completamente a merced de los cambios que se producen en ese sector (mayores exigencias de productividad para docentes-investigadores, normas de publicación cada vez más empíricas y más acríticas por parte de las revistas, etc.). Se sienten también las crecientes barreras que las revistas colocan a la publicación de estudios basados en técnicas cualitativas y estudios de caso.

Respecto a la interdisciplinariedad, de acuerdo con los autores, hablaríamos más bien de supuesta interdisciplinariedad. Pues trabajo interdisciplinario debería aludir a trabajo entre pares iguales y no a relaciones de poder entre departamentos y disciplinas.

Sobre la pérdida de influencia del movimiento obrero, efectivamente nos parece que es un proceso que, desafortunadamente, se está dando. Un proceso que abre paso a otras formas más individualizadoras de mirar lo que ocurre en el ámbito laboral.


BIBLIOGRAFÍA

Riesco-Sanz, A. y Carrasquer, P. (2021) La sociología del trabajo en España: la urgente necesidad de volver a los debates fundacionales. En: La nouvel revue du travail 19|2021.

Sayad, Abdelmalek (1990) “Les maux-à-mots de l’immigration. Entretien avec Jean Leca”, Politix, 12, 7-24

miércoles, 10 de noviembre de 2021

¿CONCILIACIÓN EN EL TRABAJO A TRAVÉS DE PLATAFORMAS?

El modelo de las plataformas no favorece la conciliación
En los últimos años, estamos asistiendo al crecimiento de un empleo ligado a plataformas digitales. Empleos que han surgido en plataformas dedicadas al transporte y el reparto (Uber, Glovo, Deliveroo, etc.), pero que van creciendo más allá de ese sector ocupando el trabajo en tareas de cuidado, estética, actividades profesionales, etc.

Dichos empleos son, mayoritariamente, de carácter autónomo o independiente, desvinculándose de la relación laboral formal. En ese contexto, se ha observado una atracción de muchas personas por la idea de “ser mi propio jefe” o acerca de la posibilidad de conciliar la vida laboral y la vida familiar.

Por lo que respecta a la conciliación, nos resulta de gran interés un reciente estudio realizado en Norteamérica (Cook et al., 2020) entre repartidores y repartidoras de la plataforma Uber. En dicho estudio, se consideraron las lógicas de funcionamiento de dicha plataforma y se determinó que existe una serie de algoritmos de inteligencia artificial que determinan el reparto de las entregas en función de una serie de variables: proximidad, rapidez en las entregas anteriores, número de horas realizadas, evaluación por parte de los clientes, etc. Los autores del estudio plantearon el tema en términos de “el algoritmo como jefe”, refiriéndose al hecho de que dichos algoritmos están sustituyendo a las personas en la toma de decisiones en plataformas como Uber.

De esa cuestión surge la pregunta sobre si esa supuesta “objetividad” de los algoritmos puede favorecer la conciliación entre vida laboral y vida familiar; y si puede facilitar que las mujeres, con mayores cargas en el hogar, puedan desempeñarse en mayor igualdad de condiciones con respecto a los hombres.

Pues bien, los resultados del estudio de Cook et al. (2020) demuestran que no es así. Las repartidoras de Uber siguen sufriendo discriminación con respecto a los hombres en términos salariales: hay una diferencia salarial del 7% en favor de los hombres, realizando “por cuenta propia” las mismas actividades. Al parecer, el algoritmo, al premiar la velocidad de respuesta de los repartidores, está penalizando también la conciliación y el trabajo de las mujeres en particular.

Una vez más, las esperanzas depositadas en la tecnología se caen por su propio peso. Es inevitable añadir que la ausencia de derechos característica del trabajo autónomo, pesa aún más sobre la conciliación y sobre las mujeres.

Cabe esperar que las trabajadoras y los trabajadores se organicen en la lucha por una mayor regulación de este tipo de empleos y del trabajo en plataformas. Pero esta tarea no la realizará ningún algoritmo.


BIBLIOGRAFÍA

Cook, Cody; Diamond, Rebecca; Hall, Jonathan V.; List, John A.; Oyer, Paul. The gender earnings gap in the gig economy: evidence from over a million rideshare drivers. Working Paper, n. 3637, Stanford University, May 2020. Disponible en: https://web.stanford.edu/~diamondr/UberPayGap.pdf

martes, 2 de noviembre de 2021

INVESTIGACIÓN COLABORATIVA EN TIEMPOS DE PANDEMIA

Como señalan Laura Montes de Oca y Ana Carolina Gómez (2021) en su artículo sobre investigación social en tiempos de pandemia, uno de los recursos expresados por los expertos es el énfasis en lo que se llama investigación colaborativa. Sobre todo en lo que respecta a la etnografía y la investigación cualitativa.

Ello implica establecer relaciones más horizontales entre las personas que interactúan en el proceso de investigación, así como la pretensión de no abusar de nuestros informantes, evitando el “extractivismo intelectual”, muy ligado al positivismo.

Todo ello implica reflexionar sobre las relaciones de poder que se dan en el proceso de investigación. Cómo los investigadores somos percibidos por las comunidades, de qué manera accedemos a las mismas y cómo se sostiene una relación continuada con ellas.

En una entrada anterior nos referíamos al tránsito del objeto al sujeto. No sabemos si de verdad la necesidad de acercarse a una investigación colaborativa ha surgido de la pandemia o no. Pero esta reformulación nos parece muy necesaria.


BIBLIOGRAFÍA

Montes de Oca, L. y Gómez, A.C. (2021) Investigación social: compromiso, relevancia y colaboración en tiempos de pandemia. En: Revista Mexicana de Sociología 83, núm. especial (septiembre, 2021): 127-158.