viernes, 29 de marzo de 2013

ANÁLISIS DE REDES SOCIALES Y SOCIOLOGÍA

Ejemplo de representación de una red
El análisis de redes sociales, también denominado análisis estructural, se ha desarrollado como herramienta de medición y análisis de las estructuras sociales que emergen de las relaciones entre actores sociales diversos (individuos, organizaciones, naciones, etc.). Busca predecir el comportamiento de las redes sociales y conocer sobre las  tendencias que se dan dentro de estos conjuntos de relaciones.

El análisis de redes se opone al análisis atributivo, que se centra en los atributos de los individuos o grupos sociales, desconociendo las relaciones que se establecen entre los mismos.

Una red social cuenta casi siempre con unos recursos cuyo acceso es uno de los rasgos que la caracterizan. De la posición que cada nodo tenga en la red depende el poder con que cuente dicho nodo.

Esta metodología de análisis se desarrolló desde las ciencias sociales, en un intento de utilizar el nivel micro para entender el nivel macro de las sociedades. Se dice que Durkheim, Tonnies y Simmel fueron precursores de esta metodología, que empezó a consolidarse en los años 30 y 40 con los trabajos de William Lloyd Warner, Elton Mayo y Alfred. Radclife-Brown . Un elemento característico del análisis de redes sociales es la tendencia a representar simbólicamente las relaciones que se establecen dentro de las mismas.

Algunas medidas estadísticas han acompañado ciertas formas de análisis de redes sociales. Entre ellas cabe destacar la centralidad de Bonacich, la centralidad de cercanía, la centralidad de intermediación o el análisis de clusters. Estudios sobre internet o sobre ciencia e innovación han sido aplicaciones prácticas del análisis de redes sociales. Para muchos, incluso la clasificación de relevancia que realizan los buscadores de internet está basada en análisis de redes sociales. Un ejemplo es el Page Rank de Google, que posiciona mejor las páginas que están siendo más enlazadas desde otras páginas.

martes, 26 de marzo de 2013

POR UNA CRÍTICA AL DETERMINISMO TECNOLÓGICO

Imagen de computadores
Es indiscutible la importancia que la Comisión Económica para América Latina tiene en la definición de políticas de los países de la Región. Dicha Comisión planteó en uno de sus documentos (Hilbert y Katz, 2003) que algunos países de Latinoamérica y el Caribe se encontrarían en un supuesto proceso de transición hacia la “sociedad de la información y el conocimiento”. Considerando la sociedad de la información como un tipo de sociedad que corresponde a un nivel de desarrollo basado en el surgimiento de un nuevo paradigma tecnológico, que se proyecta en los diversos campos de actividad. Esta trasformación está determinada por nuevas formas de crear y difundir información utilizando tecnologías digitales. El nuevo paradigma se liga al grado de desarrollo de una sociedad, en la cual la creación, distribución y manipulación de la información constituye la actividad económica y cultural más significativa.

La posición que relaciona los avances tecnológicos con el aumento del desarrollo ha sido puesta en cuestión. En su análisis de las raíces y supuestos ligados a la idea de la sociedad de la información, David Lyon (1995) plantea que en la mayoría de las versiones sobre la sociedad post industrial subyace un determinismo tecnológico. Esto es, que los cambios se atribuyen a la introducción de las TICs por sí mismas, como una causa.

Otra crítica que se le puede hacer al determinismo tecnológico pasa por el supuesto de que la presencia de una determinada técnica implica, de por sí, el despliegue de todo su potencial. Muchas veces se manejan los datos y comparaciones en un sentido de un tránsito de la sociedad industrial a la sociedad de la información, como si se tratara de un proceso lineal o por etapas, en las cuales se parte de una situación conocida y se tiende hacia un supuesto punto de llegada.

El subdesarrollo sería percibido, entonces, ante todo como un atraso temporal, posible de ser superado mediante el “salto” de etapas por las que pasaron los países desarrollados, en una dinámica asociada a las trayectorias de difusión tecnológica. También se señala que la consideración de la transición hacia la Sociedad de la Información como una etapa de desarrollo, por lo general no considera la existencia de conflictos y desigualdades (Cohen, 2004).

Estos fines utópicos atribuidos a la sociedad de la información, constituyen elementos ideológicos antes que resultado de un análisis de la realidad. Las TICs no se pueden considerar como factor de igualdad social entre países o entre sectores sociales (Lyon, 1995).

Más razonable parece la posición de Manuel Castells, en la que se considera que los países de América Latina se insertan a la sociedad informacional global de manera subordinada. La economía global que emerge de la producción y competencia basada en la información se caracteriza por su interdependencia, asimetría, regionalización, en la cual se produce una diversificación creciente de situaciones, acentuándose el desarrollo desigual no solo entre el norte y el sur, sino entre segmentos dinámicos y aquellos que arriesgan a volverse irrelevantes desde la perspectiva de la lógica del sistema (Castells, 1998).


REFERENCIAS

Castells, M. (1998). The Information Age: Economy, Society and Culture. 3 Vols. London: Blackwell.

Cohen et al (Eds.) (2004) The ICT Revolution. Productivity Differences and the digital divide. Oxford: Oxford University Press.

Hilbert, M. y Katz, J. (2003) Building an Information Society: A Latin American and Caribean Perspective. Santiago de Chile: CEPAL.

Lyon, D. (1995) The Roots of the Information Society Idea. En Heap, Ray et al. Information Technology and Society: a Reader. Great Britain: The Open University.


viernes, 22 de marzo de 2013

¿QUÉ ES PRE-TEST O PRUEBA PILOTO DE UNA ENCUESTA?

Imagen de un cuestionario a probar
El pre-test o prueba piloto de una encuesta es una actividad que forma parte del diseño de un cuestionario de investigación. Una vez que el instrumento ha sido diseñado, suele elegirse una pequeña muestra (que puede estar entre el 2 y el 10% de los casos, dependiendo del tipo de estudio, la dificultad del instrumento o los perfiles de las personas a entrevistar) para probar su funcionamiento en el campo.

La utilización del pre-test o prueba piloto resulta de mucho interés para el aseguramiento de la validez de la encuesta, es decir, que ésta mida lo que tiene que medir. En la prueba, las investigadoras/es pueden percatarse de si la redacción de las preguntas es adecuada para una buena comprensión de las mismas por parte de las personas entrevistadas. Igualmente, sirve para detectar valores inesperados de las variables, flujos de presuntas erróneos, considerar si la duración del cuestionario es la adecuada o para superar otras dificultades que pueden presentarse en el proceso de comunicación.

Desde aquí proponemos que este ejercicio sea realizado in situ por las personas que trabajan en el diseño del cuestionario, mejor que por los entrevistadores. Desarrollar la prueba de esta forma favorece que los investigadores e investigadoras perciban más claramente las dificultades del instrumento.

El buen desarrollo del pre-test permite la posterior toma de decisiones en cuanto a mejorar la redacción de las preguntas, reducir la extensión de un formulario demasiado largo, mejorar los flujos de preguntas y el orden de las mismas, entre otros objetivos. ¡Aún estamos a tiempo!!

viernes, 15 de marzo de 2013

¿QUÉ ES NORMALIZACIÓN?

Representación de la normalización
El concepto de normalización fue creado por el pensador francés Michel Foucault. Por “normalización”, Foucault entiende un sistema finamente graduado y con intervalos medibles en los cuales los individuos pueden ser distribuidos alrededor de una norma –una norma que a la vez organiza y es el resultado de su controlada distribución-.

El concepto de normalización en Foucault va ligado al de poder y se opone al de individualidad: “el poder se incardina en el interior de los hombres, realiza una vigilancia y una transformación permanente, actúa aún antes de nacer y después de la muerte, controla la voluntad y el pensamiento en un proceso intenso y extenso de normalización en el que los individuos son numerados y controlados” (Foucault, 1984).


Foucault asocia también la normalización al desarrollo de la estadística moderna. La medición de la población deriva en el establecimiento de medidas, jerarquías y regulaciones en torno a un territorio o grupo social determinado. De ahí nacen las ideas de normal y anormal, que determinan un modelo de sociedad cada vez más homogéneo.


En sociología también se ha utilizado el concepto de normalización ligado a pautas que hacen considerar normales ciertos comportamientos que pueden ser cuestionables. Para ilustrar con un ejemplo, sirva el estudio “Niños y Niñas víctimas de la Explotación Sexual en Cartagena de Indias”, publicación de la que soy coautor. En el mismo, se plantea la normalización como un factor que influye en la permanencia de este tipo de prácticas aberrantes. Así, víctimas, explotadores sexuales y ciudadanos en general han considerado estos hechos como pautas normales de la sociedad en la que viven.


En general, el concepto de normalización permite un análisis crítico de la realidad social: tanto de las políticas públicas como de la cultura dominante en un contexto determinado.


REFERENCIAS


Foucault (1984) Vigilar y castigar. El nacimiento de la prisión. Bogotá: Siglo XXI.


Varón, A., De Mares, K.C., Archila, L., Seco, E. y Becerra, A. (2012) Niños y Niñas Víctimas de Explotación Sexual en Cartagena. Bogotá: Tierra de Hombres, Universidad del Rosario.

martes, 12 de marzo de 2013

EXPECTATIVAS DE ACCESO A LA UNIVERSIDAD EN LOS JÓVENES DE SECTORES POPULARES DE BOGOTÁ

Portada de Educación y Educadores Nº 3
En la línea de una sociología crítica de la educación, referimos aquí un artículo lanzado recientemente en Colombia. La revista “Educación y Educadores”, editada por la Universidad de La Sabana, publica en su volumen 15 número 3 el artículo de las sociólogas Carmen Marina López y Lina Moncada-Jaimes, titulado “Expectativas de acceso a la universidad en los jóvenes de sectores populares de Bogotá”. 

En él se indaga sobre las estrategias de los jóvenes de sectores populares de la localidad de Usme (Sur de Bogotá) para ingresar a la universidad. Utilizando una metodología cualitativa basada en entrevistas y grupos de discusión con los graduados y encuestados en un estudio anterior realizado por Romero (2009), que afirmaron desear ingresar a la universidad cuando estaban próximos a terminar el bachillerato. 


La investigación halló que las aspiraciones, aun cuando son importantes para adelantar estrategias encaminadas hacia el ascenso en la pirámide educativa, no son el principal motor, puesto que el origen social y la regulación del campo educativo son determinantes tanto en la materialización de sus expectativas como en la producción de habitus y prácticas orientadas a su logro.

Se destaca, además, que los estudiantes que logran ingresar a la universidad adelantan sus estudios en el marco de un proyecto familiar para el cual deben adelantar tres estrategias: asumir el proyecto como un compromiso familiar, desestimar la ausencia o debilidad de capitales que los respalda, y apostarle al esfuerzo, ya que el acceso a la universidad supone una carrera de obstáculos.


Las autoras se basan la teoría de la reproducción (Bourdieu y Passeron, 1977; Althusser, 1974; Baudelot y Establet, 1976; Palacios, 1998; Cervini, 2002), que pone en cuestión la capacidad de la escuela para revertir las desigualdades sociales desde el planteamiento de la heterogeneidad de las instituciones educativas y la percepción de la cultura universitaria como parte del habitus de la clase alta.


En el análisis realizado, se plantea que el ideal meritocrático se debilita con el surgimiento de instituciones educativas con baja calidad académica que reciben a estudiantes de sectores populares; las dificultades que supone el endeudamiento familiar o la compatibilización de estudio con trabajo, el desfase entre expectativas y logros de estos estudiantes; la ausencia de confianza; los déficit educativos que ostentan; así como la desinformación que padecen a la hora de elegir carreras e instituciones educativas.


REFERENCIAS

Althusser, L. (1974). Sobre la ideología y el Estado. Ideología y Aparatos Ideológicos del Estado. En Escritos. Barcelona: Laia.


Baudelot, C. y Establet, R. (1975). La escuela capitalista en Francia. Madrid: Siglo XXI editores.


Bourdieu, P. y Passeron, J. C. (1977). La reproducción. Elementos para una teoría del sistema de enseñanza. Barcelona: Laia.


Cervini, R. (2002). Desigualdades en el logro académico y reproducción cultural en Argentina. Un modelo de tres niveles. Revista Mexicana de Sociología, 7, 445-500.


Palacios, J. (1997). La educación en el siglo XX. La crítica radical. Caracas: Editorial Laboratorio Educativo.


Romero, A. (2009). Expectativas y aspiraciones de los estudiantes de undécimo grado en la localidad de Usme en Bogotá D.C. (dos estudios de caso). Tesis de grado no publicada. Bogotá: Universidad del Rosario.

viernes, 8 de marzo de 2013

RELACIONES EN RED Y PODER

Portada de publicación de Castells
El concepto de organización sistémica, que explicábamos en una entrada dedicada a los cambios organizativos dados en la banca colombiana, tiene afinidades con el concepto de organización en red de Castells (1998). La necesidad de flexibilidad e innovación, según este autor, exige reemplazar las formas de control autoritario, diferenciado jerárquicamente, de tipo burocrático, por relaciones en red, como una estructura alternativa.

Las corporaciones ya no pueden verse como unidades estables y homogéneas. Antes bien, pueden ser percibidas como entidades mutuamente interdependientes en flujo constante, relacionadas entre sí mediante redes complejas de contratación, en continuo proceso de renegociación (Huws, 2006).


No obstante, las relaciones en red no implican necesariamente relaciones simétricas “entre iguales”. Se trata de relaciones de dominación/subordinación entre empresas –dependiendo del poder de negociación de cada parte y del carácter más o menos estratégico del bien o servicio que proveen (Hermann, 2006; Thompson, 2003). Suele con frecuencia encontrarse una parte fuerte y una parte débil, y la primera suele imponer sus condiciones basándose en el tamaño o en una mejor situación de mercado; mientras que la parte más débil puede sufrir la amenaza de ser sustituida por otra de similares características.



REFERENCIAS


Castells, M. (1998). The Information Age: Economy, Society and Culture.

Londres: Blackwell.

Hermann, C. (2006). Labouring in the network. En Capitalism, Nature

and Socialism, 17 (1) 65-76.

Huws, U. (2006). The transformation of Work in a Global Knowledge Economy: Towards a Conceptual Framework. Bélgica: Katholik University of Leuven.


Thompson, G. F. (2003). Between hierarchies and markets: The Logic and Limits of Network Forms of Organization. Reino Unido: Oxford University Press.

miércoles, 6 de marzo de 2013

TIC'S EN LAS EMPRESAS: LA PARADOJA DEL CLIENTE

Imagen de un portal bancario de integración con clientes
En una anterior entrada se hacía referencia al concepto de organización sistémica. Cabría esperar que la integración sistémica de las empresas con sus clientes llevara a una despersonalización de las relaciones, haciendo innecesaria la atención personalizada en las relaciones comerciales y de prestación de servicios. No obstante, varios indicios apuntan hacia lo contrario:

En primer lugar, pese al auge del comercio electrónico, la figura del vendedor no desaparece. Los departamentos comerciales han representado históricamente para las empresas una inversión encaminada al desarrollo de redes interpersonales que tratan de mantener y aumentar una cartera de clientes. Pese a los cambios, siguen visitando físicamente a los clientes. La integración “remota” de vendedores prueba que las empresas están incorporando tecnología al trabajo del vendedor, sin que la tecnología haya cambiado el papel fundamental de éste. Como señala un alto directivo de una empresa comercializadora de autopartes, el trato personal no puede eliminarse; y muestra que la incorporación de tecnología busca que el vendedor se centre en su trabajo de visitar, reduciendo el tiempo que antes pasaba en la oficina planificando el trabajo o reportando información sobre el cliente.

En segundo lugar, con ayuda de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, el nuevo mercadeo busca personalizar los productos y las promociones, adaptándolos a las necesidades particulares de cada cliente.

Y en tercer lugar, la implementación del comercio electrónico y los canales electrónicos es vista por las empresas como un medio para poder alcanzar nuevos nichos de mercado, reducir costos o disminuir intermediarios en el proceso de comercialización. Pero, por los testimonios expresados en las entrevistas realizadas, también se advierte el riesgo de despersonalización: la paradoja del cliente.

Con esta reflexión no se está sugiriendo que los canales electrónicos o el comercio electrónico vayan a desaparecer. Lo que la definición de esta paradoja plantea es cuestiones relativas al futuro, en cuanto al uso de las diversas formas de integración sistémica con clientes: ¿de qué manera resolverán las empresas los dilemas que plantea la paradoja del cliente? ¿Cómo reorientará la banca el papel de los canales electrónicos: reorganizará nuevamente sus plantillas, o restringirá los canales al ámbito operativo? ¿Servirá el comercio electrónico para eliminar intermediarios en las cadenas de distribución? ¿Seguirá el llamado e-commerce dominado por portales especializados en esta modalidad, o las grandes cadenas del comercio renunciarán a todo un conocimiento acumulado para apostar fuerte por esta nueva forma de vender? ¿De qué manera reorientarán los negocios sus estrategias comerciales, ante el advenimiento de esta nueva forma de comprar y de vender? ¿Prevalecerán las potencialidades de uso efectivo de la técnica o la necesidad de mantener relaciones basadas en la proximidad?

martes, 5 de marzo de 2013

¿QUÉ ES RESILENCIA?

Portada del libro "Resilencia y Subjetividad"
Resilencia es un concepto que  procede de la psicología. Ha sido definida como la capacidad de los sujetos para reponerse a períodos de dolor emocional y traumas. Muchos pensarán que resilencia es un concepto positivo y psicologista que introduce una mirada optimista al devenir de los sujetos y la estructura social. 

Pero para Emiliano Galende, “pensar la resilencia es justamente subvertir la idea de causalidad que gobierna el pensamiento médico positivista y algunas concepciones de la salud. El concepto de resilencia introduce el azar, lo aleatorio, altera la idea de relaciones necesarias entre los fenómenos de la vida” (2004, p. 23).

La posición de Galende tiene implicaciones en cuanto a la evaluación de intervenciones sociales y políticas públicas: “es pensar al individuo no como víctima pasiva de sus circunstancias sino como sujeto activo de su experiencia”. La resilencia se opone, de esta manera, a la victimización, concepto propio de la biopolítica, que percibe a la víctima como un sujeto pasivo desposeído de su experiencia y su interacción social.
Galende plantea que resilencia evoca la existencia de un mundo complejo definido por patrones diferentes a la causalidad. Uno de ellos es la subjetividad,  que significa ir más allá de las ideas de individuo y población que tanto han caracterizado las políticas públicas.

Por todo ello, el concepto de resilencia puede ayudar a dejar atrás las viejas miradas biopolíticas que han guiado las políticas públicas e intervenciones sociales en problemáticas de salud, derechos humanos, infancia y adolescencia, atención a población desplazada por la guerra, etc.


REFERENCIAS

Merino, A., Suárez, E.N., Rodríguez, D. (2004) Resilencia y subjetividada: los ciclos de la vida. Buenos Aires: Paidós.




sábado, 2 de marzo de 2013

PSPP, SOFTWARE LIBRE ALTERNATIVA A SPSS

logotipo de PSPP
PSPP es un paquete estadístico en software libre que se inspira en SPSS. La primera versión data de Agosto de 1998 y, aunque todavía se encuentra en desarrollo, las pruebas que hemos realizado con la versión 0.7.9 han sido bastante satisfactorias. El programa puede descargarse de la siguiente dirección. Existen versiones para LINUX, Windows y Mac OS X.

Entre las ventajas señaladas por los desarrolladores, se encuentran las siguientes: sus archivos de datos y sintaxis son compatibles con SPSS; interactúa con otras aplicaciones de software libre, tales como Gnumeric, LibreOffice u OpenOffice; los menús se encuentran en diferentes idiomas, entre ellos el español; permite trabajar con bases de datos de gran tamaño; y cuenta con un manual de usuario.

Aunque el entorno visual de PSPP es muy similar al de SPSS, el primero dispone de un número limitado de funciones a realizar desde los menús del programa. No obstante, hemos podido comprobar que algunas de las funciones que no aparecen en los menús del programa (tales como fundir archivos, reestructurar archivos o contar casos dentro de las variables) pueden ser realizadas a través de la sintaxis.

Tal vez la parte más débil del programa sea la ventana de resultados, que aunque exporta tablas a pdf, txt, html, csv, odt (open document), ps (Post-script), aún no permite editar los cuadros dentro de la aplicación.

No obstante, queremos felicitar desde aquí la iniciativa y contribuir a su difusión, pues permite el trabajo tanto de principiantes como de usuarios avanzados de los paquetes estadísticos. Para un uso avanzado se requiere conocer la sintaxis de SPSS.